Las vacaciones de invierno pueden ser la excusa ideal para que la firma abra sus puertas y organice día de padres e hijos en la oficina.
Llegan las vacaciones de invierno y la agenda de los padres se escapa de la rutina. ¿Por qué no repetir la experiencia en la oficina o la fábrica? Permitir que los niños se acerquen al espacio laboral es una acción que trae beneficios para todas las partes, porque ayuda a construir la cultura del trabajo, porque libera –aunque sea solo un día– a los adultos de la organización del cuidado y porque le permite a la empresa profundizar el vínculo con sus talentos. Por todo eso, les acercamos algunas ideas para recibir a los pequeños:
- Limitar los tiempos:
Es muy importante saber cuánto querrán que se extienda la actividad para así organizar las acciones y los espacios. Algunas firmas pueden poner una fecha especial para dedicarla a los niños, pero otros abren organigramas más flexibles durante las dos semanas.
- Acondicionar el espacio:
Se puede decorar un sector de la oficina para que los niños puedan jugar allí libremente. Desde ponerles una biblioteca, elementos de escritorio (sabemos que los adoran, nada como imitar a papá y mamá), almohadones en el piso para los más pequeños y se pueden destinar dispositivos como tablets para los más grandes.
- Jugar y jugar:
Si se optó por una jornada especial para recibirlos, lo ideal es pensar en actividades que hagan que los niños interactúen entre ellos además de sus familiares. En cambio, si se eligió dedicarles varios días, una buena opción es tener juegos como un metegol o una mesa de ping pong para darles entretenimientos que puedan usar sin la atención plena de los adultos.
- ¿Qué comemos?:
Para los niños la comida es parte de cualquier salida, por eso es un punto extremadamente importante. Si la empresa tiene comedor, esos días se puede planificar tener un menú infantil (hamburguesas, milanesas; no pueden faltar las papas fritas y los helados) o regalarles a los colaboradores vouchers para ir a algún restaurante de la zona con platos adecuados. Un gesto que suma: a media tarde, un kit de merienda con una chocolatada y galletitas.
- La bolsita:
Es una costumbre impuesta por los cumpleaños, pero que los más pequeños siempre esperan: el souvenir. ¿Qué darles? Desde accesorios de escritorio (pueden estar brandeados) hasta kit escolares.
El objetivo es que todos la pasen bien, y eso debe estar siempre en la mira de quienes organicen estas acciones.
Este año el equipo de Capital Humano de ManpowerGroup Argentina organizó un festejo del Día del Niño muy entretenido con temática de El Rey León. Contrataron animadores, maquilladoras y hasta hubo una cabina para sacarse fotos. Las oficinas fueron especialmente ambientadas con juegos, masa, rompecabezas, y las salas de conferencias fueron reservadas a los gamers para jugar al Fortnite. Además, se dispusieron atriles para que los niños pudieran pintar los personajes de la película. Y lo más importante fue dejado para el final del evento: ir al cine a ver El Rey León 3D.
