Liderazgo abierto, una nueva autonomía

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Publicado el 04/03/22

Para muchos líderes, gran parte de su trabajo se resolvía viendo a su equipo sentado en sus posiciones en la oficina. Sin embargo, el teletrabajo se impuso en la nueva normalidad post pandemia y eso abrió interrogantes para muchos, pero para otros les abrió la oportunidad para brindarles a sus equipos autonomía.  

Precisamente este nuevo concepto es el que entra al mundo laboral, y lo constituye. Hoy un buen líder no es el que controla, sino el que otorga libertad a los talentos para que puedan desarrollar sus actividades. El nuevo líder no es la voz de mando, es el que brinda apoyo para que el equipo todo llegue a los objetivos planteados.  

En este sentido, es importante que cada colaborador pueda tomar decisiones. El líder debe crear el clima para que todos se animen a proponer nuevas ideas, que se presenten a desafíos y que se impulsen entre los integrantes del equipo.  

Es sumamente significativo que el líder pueda ver qué fortalezas tiene cada colaborador, y que se las deje siempre en claro, porque eso hará que ganen confianza, pero también que entre los compañeros se potencien, ayudando a que cada uno muestre lo mejor de sí.  

Sin lugar a dudas, todo esto se logra cuando un líder es empático. Esto es vital para que haya un buen clima laboral, y para que todos se sientan escuchados y valorados. Un equipo sin motivación corre el riesgo de hacer que los talentos se pierdan y salgan de la organización, por eso es preciso comprender en profundidad las necesidades de cada profesional.  

Por último, para que todo esto sea posible, cada líder deberá primero trabajar en su autoconocimiento, ya que éste será la base para poder comprender a los otros, adelantarse a lo que pedirán los talentos y hasta detectar qué puede estar precisando cada uno para sentirse mejor en su posición. Para esto el coaching es una gran herramienta, que siempre suma para que todos puedan mejorar.