Estar preparados para la transformación que se está gestando es vital para mantener la empleabilidad en un sector altamente cambiante.
La transformación digital impacta en todo el ecosistema de una compañía, incluyendo, claro está, a sus trabajadores. Por eso, las personas deben saber qué es lo que viene para prepararse y adecuar sus habilidades de cara al futuro. Con esta premisa, ManpowerGroup en su estudio La fábrica del futuro. Mapeo de las habilidades que impulsarán la industria manufacturera se adentra en describir qué cualidades necesitarán los trabajadores del mencionado sector.
“Los propios trabajadores se verán afectados de diferentes maneras por los cambios en la industria manufacturera. Aquellas industrias que se transforman rápidamente van a requerir que una cuarta parte de sus trabajadores sean pioneros, es decir, que sean los primeros en introducir las nuevas ideas y procesos que impulsen la transformación. Uno de cada cinco empleados será una pieza clave para que los procesos se ejecuten según la estrategia, mientras que la mayoría (60%) será productor, responsable de que las cosas sucedan cada día para que el cambio ocurra. La función de los productores existe en todos los dominios, desde los ejecutivos hasta los trabajadores de TI (Tecnología de la Información) y de la planta de producción”, explica el informe.
El cambio también se verá en los estilos y funciones de liderazgo. El desarrollo de las habilidades de los líderes resulta más importante que nunca en la Revolución de las Habilidades, ya que las nuevas funciones emergen tan rápido como otras se vuelven obsoletas, y la gente necesita aprender continuamente para mantenerse en condiciones de ser empleada.
La buena noticia es que la transformación digital (en todas las industrias, incluida la manufacturera) no significa el reemplazo completo de la estructura de un liderazgo sólido. Más bien, se aplicaría la regla 80/20. Las habilidades de liderazgo fundamentales, como la resistencia y la adaptabilidad, siguen siendo esenciales. Sin embargo, en la era digital, los líderes efectivos también deben fomentar el 20 por ciento adicional –liberar el talento, atreverse a liderar y a veces a fallar– para así acelerar el rendimiento.
Uno de los principales roles de los líderes digitales será fomentar una cultura de innovación calculada y a la vez controlar el riesgo. Así, los líderes deben aprender rápido y estar preparados para cambiar de rumbo con agilidad, optimizando al mismo tiempo las oportunidades.