Compañías como Netflix vienen impulsando esta modalidad de descanso, pero ¿es posible implementarla sin que cause conflictos?
Conforme nos acercamos a fin de año hay un tema que va ganando protagonismo en los pasillos de la empresa: qué días se tomará cada uno para descansar. Poder consensuar para que todos tengan lo que desean parece una tarea titánica para los líderes. Frente a esta realidad, algunas compañías han empezado a generar alternativas como las vacaciones ilimitadas.
¿De qué se trata? Las organizaciones que las han adoptado les dan a sus colaboradores la cantidad de días que ellos piden, sin limitar el período. Y, según atestiguan con su experiencia, lejos de lo que se puede presuponer, no existen abusos por parte de los empleados a la hora de ausentarse.
Esta nueva modalidad viene impulsada por las generaciones más jóvenes que, al aumentar la frecuencia en los cambios laborales, comienzan nuevamente de cero la sumatoria de sus días de vacaciones. Y esto se contrapone a sus deseos de hacer viajes de ensueño y de varias semanas de duración.
En esta nueva organización es muy importante haber desarrollado la confianza entre los integrantes de los equipos y sus líderes, de ese modo se dará naturalmente la autogestión, tanto en los recesos como en el rendimiento, pues es el grupo el que controla, avala y restringe la práctica.
Este puede ser un beneficio interesante, pero para que funcione la compañía debe haber elaborado previamente sus valores y confianza, además de tener aceitado el trabajo por objetivos, con un organigrama claro y que se respete. En estos equipos debe estar en claro que el todo es más que la suma de las partes, pero sin las partes presentes es difícil llegar a los resultados.
Entre los aspectos positivos, es claramente una herramienta muy atractiva para retener talentos, por eso es muy buscada dentro de la industria IT, en la que la escasez de profesionales es un factor de preocupación contante en los departamentos de Recursos Humanos. Incluso, aseguran, genera un mayor compromiso hacia los proyectos por parte de los colaboradores.
Por último, se sabe que una persona trabaja mejor cuando está más motivada y que los días de descanso favorecen la aparición de la creatividad. En parte, esto se busca con esta modalidad que les da a los empleados libertad para poder armarse su agenda de vacaciones y relax.